Es el día más sagrado del año judío. ¡Deberíamos saber qué estamos haciendo y hacerlo bien!
Ángel por un día
¿Qué son los “ángeles”? Los ángeles son seres completamente espirituales, que tienen el objetivo exclusivo de servir a su Creador.
En Iom Kipur, cada judío se asemeja a un ángel. Como explica el Maharal de Praga:
“Todas las mitzvot que Dios nos ordenó [en Iom Kipur] están diseñadas para remover, en la mayor medida posible, la relación de una persona con el mundo físico hasta que la persona se asemeje a un ángel”.
Así como los ángeles (por así decirlo) se paran derechos, así también nosotros pasamos la mayor parte de Iom Kipur parados en la sinagoga. Y así como los ángeles (por así decirlo) se visten de blanco, así también nosotros acostumbramos a vestirnos de blanco en Iom Kipur. Así como los ángeles no comen ni beben, de la misma forma, nosotros no comemos ni bebemos.
Cinco aspectos
Hay cinco áreas físicas de los cuales nos apartamos en Iom Kipur. Ellas son:
- Comer y beber
- Lavarnos
- Aplicarnos aceites o lociones en la piel
- Tener relaciones maritales
- Usar zapatos de cuero
A lo largo del año, pasamos nuestros días enfocados en la comida, el trabajo, las posesiones materiales superficiales (simbolizadas por los zapatos) y los placeres superficiales (simbolizados por los aceites). En Iom Kipur, reorganizamos nuestras prioridades de acuerdo a lo que realmente importa en la vida.
Como Rab Eliahu Dessler escribe:
“En Iom Kipur el poder de la ‘inclinación negativa’ es disminuido. Por lo tanto, nuestro anhelo de elevarnos espiritualmente se reafirma, después de haber estado latente como resultado del efecto del pecado en el alma. Este rejuvenecimiento de las intenciones le da derecho a la persona a ser considerada de manera especial y ser perdonada”.